Los candidatos más frecuentes para una operación de párpados suelen ser mujeres y hombres a partir de los 35 años de edad con un buen estado de salud general. Algunos pacientes, por sus rasgos genéticos, presentan un aparente exceso de piel desde edades más precoces. En estos casos suele tratarse más bien de una configuración del párpado de tipo más asiático, con el pliegue palpebral más bajo, y eso da un aspecto de exceso de piel.
Es importante detectar aquellos pacientes que tienen unas cejas caídas o bajas, ya que en estos casos la blefaroplastia sola no consigue despejar el párpado suficientemente y puede ser necesario añadir un lifting de cejas. Como cualquier intervención de cirugía estética, para una operación de párpados o blefaroplastia es importante tener expectativas razonables. Es decir, esta cirugía mejorará nuestro aspecto y nos puede hacer sentir mejor con nosotros mismos, pero no puede conseguir cambios drásticos en la apariencia y su efecto se limita al párpado superior. Cualquier problema médico pre-existente debe ser controlado previo a una cirugía de este tipo, especialmente hipertensión y diabetes. No existe ningún problema médico que impida realizar esta cirugía, siempre que esté bien controlado.
Si necesitas mas información al respecto , mándanos tus datos a nuestro mail que te responderemos a la brevedad.